Entrenador no fue ajeno a la crisis y criticó que el Perú esté “abandonado” por sus autoridades.
El entrenador de la selección peruana, el profesor Ricardo Gareca –gestor de las pocas alegrías que ha recibido nuestro país en los últimos días– no pudo evitar referirse a la crisis política y social que embarga a nuestro país, originada por la incapacidad del presidente Pedro Castillo, y con un contundente pedido de que “Dios ilumine a los políticos”, invocó al Gobierno a encontrar soluciones.
El estratega argentino brindó ayer una conferencia de prensa, pero apelando a su liderazgo quiso apoyar y solidarizarse con el pueblo peruano. Por ello, empezó refiriéndose al paro de transportistas y a las decisiones políticas que han desencadenado la crisis.
“Quiero mandarles un abrazo grande, siento mucho todo lo que se está atravesando. Lo importante es estar unido más que nunca como país”, indicó acongojado.
Más adelante, Gareca hizo hincapié en que no solía hacer declaraciones de tinte político, pero que le sorprendía que el Perú se encuentre “abandonado” por las autoridades. Y en clara referencia al absurdo toque de queda del martes, reclamó que “dejen trabajar” a la población. “Lo único que quiere el pueblo es trabajar, que le den la posibilidad de crecer… a los jóvenes, a la gente, a los que salen a buscar el día a día el trabajo. Cuando hay más del 60% de informalidad hay que ir a trabajar”, comentó.
SOLUCIONES
Y luego de dar una serie de anuncios deportivos, Gareca cerró la conferencia así: “Que Dios ilumine a los políticos para que encuentren una solución, para que el pueblo deje de padecer los problemas que está padeciendo y que, de una buena vez, el país se pueda encausar en el bienestar de toda la población”, sentenció.
